A manera de anécdota aquí un boceto de las ideas que fueron quedando cuando Víctor Meza vino a buscarme para desarrollar este proyecto, nótese la fecha: Junio 2003. 6 años después el proyecto es retomado por el Ballet Nacional y continuamos el proceso de creación del espacio para la coreografía. Una estética contemporánea, acentuar la idea del continente/contenido, con un aquí-adentro y un allí-afuera, la frialdad de la razón y la energía del sentimiento, razón y rebeldía, funcionalmente la posibilidad de creación de ritmos con entradas y salidas. La verticalidad de los elementos, el plástico como material (los tabiques fueron revestidos con cartón plástico) y la posibilidad que brindaban para su iluminación, la translucidez que permitió jugar iluminando continente y contenido de diferentes maneras acentuando la significación de lo que allí acontecía. Intersticios que dan cuenta de un espacio afuera, elementos que contienen y atrapan, un espacio adentro, pero que pertenecen a un mundo